Piel grasa: El brillo que nunca quise tener

La piel grasa siempre ha sido un problema para mí. Basta con ver las fotos y selfies que me tomaba para ver una cara brillosa. Cuando hacía calor, no importaba que no estuviera sudando, la gente siempre me veía raro porque en mi piel se notaba mucho más el brillo. Todo esto realmente me afectó aunque no me diera cuenta.   

Usé distintos tratamientos y hacks que encontraba en Internet. Desde sueros hasta papeles especiales que “quitan” el brillo, pero que a veces me lastimaban o no daban el resultado que esperaba. 

 

Encontrar el balance entre mi cuerpo y los productos que utilizo necesitó de un viaje de autodescubrimiento. A través de mi propia rutina de skincare no solo comencé a entender lo que más me funcionaba, ese pequeño ritual me ayudó a mejorar mi ánimo, se convirtió en un hábito de autocuidado en el que sentía cómo estaba en un diálogo conmigo misma. 

 

Más allá de combatir los síntomas, aprendí a escuchar mi cuerpo y sus necesidades. Así, mi rutina se convirtió en mi mejor aliada para sentirme a gusto con el cuerpo que tendré siempre. Además, gracias a que mi rostro siempre está hidratado, tengo el plus de que evito el envejecimiento prematuro y las arrugas tardarán mucho más en llegar. 

Una línea de productos que sea adecuada para mi piel fue muy difícil de encontrar, pero Rice & Shine llegó para cambiarme la vida: mi piel se ve sana, hidratada y sin exceso de grasa. Me encanta sentirme cómoda en lo que soy y lo que me hace sentirme tan yo.

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